Elegir el color blanco para el interior de tu departamento podría ser una decisión sabia, sin embargo, escoger un departamento en blanco podría entregarte muchos beneficios.
El timing para invertir un departamento podría ser clave, dado que durante el proceso de selección podrás encontrar propiedades en distintas etapas de construcción. Por eso, es relevante tener en cuenta los beneficios que esto conlleva para elegir el inmueble.
La compra de una propiedad en blanco tiene relación con los papeles -adivina- en "blanco" comprometidos para un proyecto, pero que aún no ha iniciado sus obras. En pocas palabras, consiste en la adquisición de un bien raíz que todavía no cuenta con su edificación ni tiene piloto.
En cambio, la compra en verde se relaciona con una propiedad que se encuentra ad portas de finalizar su construcción y que aún no está lista para su entrega, sin embargo puedes observar los detalles y características de la vivienda.
Inclinarse por la compra en blanco puede ser atractivo por los mayores descuentos que traería consigo la propiedad a un valor más accesible, en comparación con un inmueble que estaría en las últimas etapas para su entrega, y aumentando su plusvalía durante el periodo de construcción.
Algunas inmobiliarias lanzan “ofertones” bajo esta modalidad, para asegurar una gran cantidad unidades vendidas antes de concretar la entrega del proyecto.
Una compra en blanco podría evitarte sacar “canas verdes” a la hora del pago. Dado que, al no haber comenzado la edificación del inmueble, tienes mayor tiempo para seguir ahorrando el dinero destinado para el pie del crédito.
Otra opción para aliviar tu bolsillo es pagar en cuotas el pie para tu departamento. Recuerda que los créditos hipotecarios comienzan a pagarse al momento de la entrega de la unidad, por lo que existe un tiempo entre la toma del crédito y el cobro de las cuotas.
Si bien en el terreno todavía no se han iniciado las obras, esta modalidad de compra te permite escoger a tu gusto el departamento. Puedes elegir libremente el piso, orientación, entre otros elementos en base a tu conveniencia.
Como señalamos previamente, la compra de un inmueble en blanco todavía no inicia sus obras, por lo que no cuenta con un piloto como referencia para los potenciales compradores.
Es recomendable llenarse de confianza -y mucha paciencia- en invertir en un departamento que no podrás ver hasta un par de años después. Ante esta situación, algunas inmobiliarias ofrecen tours virtuales para conocer los detalles de los proyectos.
Otro aspecto que puede mermar la voluntad de comprar en blanco está relacionado con la incertidumbre respecto al financiamiento de la propiedad. Entre el periodo de firma de la compraventa y entrega del departamento pueden surgir imprevistos para un inversionista que podrían cambiar las condiciones para el crédito hipotecario.
Una de las dudas que resaltan entre quienes analizan la opción de comprar en blanco tiene relación con la posibilidad de que no se concrete el desarrollo del proyecto. Sin embargo, existen seguros asociados a la promesa de compraventa que estipulan la devolución del dinero invertido en caso de no concretarse la entrega del proyecto.
Esperamos que estos elementos sean de ayuda a la hora de atreverte a invertir en una propiedad en blanco.
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