Cuando un arrendatario firma un contrato de arriendo, se compromete a cumplir con los plazos y condiciones establecidas. Sin embargo, en algunos casos, el arrendatario puede arrepentirse y decidir dejar el departamento antes del tiempo acordado.
Este tipo de situaciones pueden generar inconvenientes tanto para el propietario como para el arrendatario, por lo que es importante conocer los compromisos que implica un término anticipado del contrato de arriendo.
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La mayoría de los contratos de arriendo establecen la obligación del arrendatario de notificar con anticipación su intención de dejar la propiedad. En Chile, lo más común es que el aviso se haga con al menos 30 días de antelación, salvo que el contrato indique un plazo diferente. Este aviso permite al propietario buscar un nuevo arrendatario y minimizar la vacancia del inmueble.
Si el arrendatario decide abandonar la propiedad antes del plazo acordado en el contrato, es posible que deba pagar los meses de arriendo restantes hasta completar el período estipulado. No obstante, en algunos casos, se puede negociar con el propietario para que este libere al arrendatario de esta obligación si encuentra un nuevo ocupante rápidamente.
Algunos contratos incluyen una cláusula de indemnización en caso de término anticipado. Esto significa que el arrendatario deberá pagar una compensación al propietario por los perjuicios causados, como la vacancia del inmueble o la pérdida de ingresos hasta que se arriende nuevamente. Este monto puede estar fijado en el contrato o calcularse en base a un porcentaje del arriendo mensual.
El arrendatario debe asegurarse de entregar la propiedad en buenas condiciones, tal como la recibió al inicio del contrato. Esto implica:
Además, es recomendable hacer una inspección conjunta con el propietario o la empresa de administración de departamentos para verificar el estado del inmueble y evitar futuros reclamos.
La garantía entregada al inicio del arriendo puede ser utilizada por el propietario para cubrir deudas pendientes, daños a la propiedad o cualquier otro incumplimiento contractual. Sin embargo, el arrendatario tiene derecho a solicitar el reembolso de la parte de la garantía que no haya sido utilizada.
Si el arrendatario decide abandonar la propiedad antes del término del contrato, estará incumpliendo el acuerdo firmado. En este caso, se le cobrará una multa equivalente a dos cánones de arriendo, lo que compensa el incumplimiento y el tiempo necesario para encontrar un nuevo arrendatario.
Desde Assetplan, nos encargamos de gestionar el cobro de esta multa y, una vez que el pago haya sido realizado, el monto será transferido en su totalidad al propietario.
Es importante destacar que esta multa no se aplica en situaciones de fuerza mayor o en casos que afecten la habitabilidad del arrendatario. Algunas situaciones en las que no procede el cobro de la multa incluyen:
En Assetplan nos ocupamos de la gestión completa para que no tengas que preocuparte. Una vez que se cobre la multa y se haya transferido al propietario, volvemos a publicar el departamento y trabajamos en la búsqueda de un nuevo arrendatario para minimizar la vacancia.
Si tienes dudas sobre este proceso o necesitas asesoría sobre tu propiedad en arriendo, no dudes en contactarnos. En Assetplan, estamos aquí para ayudarte a administrar tu propiedad, completa este formulario para solicitar asesoría con uno de nuestros ejecutivos.